Mientras buena parte del territorio brasileño sufre las consecuencias de la pandemia, en Belo Horizonte, una de las ciudades más futboleras, se habilitaron las prácticas para los planteles profesionales. Atlético Mineiro no quiso perder tiempo y este martes estará completando su primera semana de entrenamientos. El elenco comandado por Jorge Sampaoli cumple protocolos de seguridad para evitar contagios. 

Por el momento, el grupo de trabajo es reducido, con sesiones que incluyen sólo algunos pocos jugadores y a parte del cuerpo técnico. Los asistentes -incluido el mismo entrenador casildense- utilizan tapabocas todo el tiempo en la cancha y hasta las ruedas de prensa se realizan con ese implemento. Además, todos los elementos son desinfectados una vez que terminan de ser utilizados.

No hay una fecha cierta de retorno a la competencia de los campeonatos estaduales, instante en el cual se cortó el fútbol en Brasil y parece aventurado pensar en eso teniendo en cuenta que existen estados en los cuales los planteles profesionales todavía permanecen confiados. Aun así, el Galo ya piensa en el rearmado del plantel. De hecho, el Zurdo dio de baja seis jugadores, entre ellos al historico Ricardo Oliveria y al mendocino Fraco Di Santo. En lista de apuntados, se busca al chileno Eduardo Vargas y al volante creativo de Lanús, Marcelino Moreno.

Belo Horizonte está lejos de ser el centro en el cual el Covid-19 se instaló con más fuerzas. De hecho, hasta el día de ayer, sólo se registraban 1189 casos positivos y el 80% de los pacientes ya poseen el alta médica. Lo que permitió al Alcalde no sólo habilitar la práctica del deporte profesional, sino también abrir puertas de comercios.