Ni los muertos tienen paz en las calles de la ciudad. Una vez más la estatua que representa la figura del General Perón fue el blanco de un acto vandálico. La misma había sido reparada y modificada hace muy poco tiempo, aunque no pasó demasiado para que se generaran nuevos destrozos.

El pasado 22 de febrero, los miembros de Partido Justicilista advirtieron la situación y hasta presentaron una denuncia formal por los desmanes que se había ocasionado. De todas maneras, no hubo mal que por bien no venga. El busto fue reformado y se le dio otra impronta. Se lo pintó de color dorado y se añadió el escudo que representa al partido.

Lamentablemente, en el día de ayer hubo personas que dieron aviso de que la estatuilla volvió a ser deformada. En este caso se puede observar que la parte de la nariz está completamente partida. A diferencia de la primera oportunidad, no hay pistas que marquen quienes serían los responsables. La primera vez había inscripciones en el monumento de un grupo que se identificaba como La Banda 17.