La historia de cinco hermanos separados en su infancia por un drama familiar
Una camiseta vieja de Colón y una foto atesorada por años fueron los símbolos de la búsqueda de hermanos que fueron separados durante su infancia y que pudieron reencontrarse 25 años después.
Adán, Graciela, Norma, Carlos y Marcelo son los protagonistas de esta historia. Cuando eran pequeños atravesaron una crítica situación familiar que los obligó a criarse solos en la ciudad de Santa Fe, hasta que una denuncia vecinal llevó a que, en el año 2000, un Juzgado de Menores dispusiera la separación de los hermanos.
Pasado algún tiempo de separación, Graciela y Norma abandonaron la Casa Cuna y los dos hermanos menores fueron dados en adopción, perdiendo todo tipo de contacto familiar.
Adán, el mayor de los cinco, conservó como recuerdo una camiseta de fútbol de Carlos con la ilusión de entregársela algún día. Fue él quien inició la búsqueda acercándose a la Secretaria de Derechos Humanos de la Provincia, donde comenzaron una investigación que culminó en el reencuentro. Acompañaron el difícil proceso respetando los tiempos individuales de reconstrucción de identidad. El derecho a la identidad biológica es primordial para quienes necesitan conocer sus orígenes o tienen dudas sobre su identidad; por eso Emilio Jatón, secretario de DDHH aseguró que: “este derecho inherente a todo ser humano exige la máxima protección del Estado”.
Los hermanos más pequeños recibieron la delicada noticia de que un supuesto hermano mayor los estaba buscando, siendo que ellos tenían escasos recuerdos. Justo en ese momento, cobró sentido haber guardado por tantos años la camiseta en el placard.