Un caso de bullying que terminó con la mamá de la víctima golpeada por familiares de la agresora
En diálogo exclusivo con Casilda Plus, una mamá expresó su dolor por la situación que vive todos los días su hija en la escuela. Relató que es víctima de bullying y, por el acoso que recibe, no quiere asistir a clases por la tristeza que siente.
El acoso diario es producido por una ex compañera repitente que la hostiga desde hace tres años, quien le rompe los útiles escolares y ropa. Ambas son menores de edad, y en estos últimos días, el tema pasó a mayores cuando la agresora escribió el número de teléfono de la víctima en el pizarrón de la escuela y en una de las plazas acusándola de hacer pornografía. A raíz de esto, la víctima comenzó a recibir fotos obscenas y mensajes inapropiados de números desconocidos.
“Para mí lo más grave es que mi nena, desde primer año, quiere dejar la escuela porque sufre todo esto. Con lo que pasó hace una semana atrás, ya no quiere ir más a la escuela. No se quiere levantar, se la pasa llorando, no quiere ni siquiera salir afuera porque se siente mal”, expresó con tristeza la mamá.
La situación escaló a algo mucho peor cuando se enteraron que había una denuncia de por medio. La progenitora de la agresora fue a la casa de esta mamá y su hija, y el desenlace no fue para nada bueno; la mamá de la víctima se convirtió en otra víctima de violencia por parte de la familia de la agresora. Le dieron una golpiza que concluyó con la fractura de su muñeca y amenazas de muerte. Aunque el alta ya está dada, espera por la cirugía.