El casildense Roberto Aquilano es el cerebro pensante de una investigación que se está desarrollando en conjunto entre dos prestigiosas universidades de Estados Unidos y la NASA. El experimento está situado en la Estación Espacial Internacional e intenta comprobar si la variedad de la microgravedad puede cambiar el reloj biológico de los seres vivos. Lo curioso, es como comenzó esta historia.

"Fue hace 20 años, cuando di una conferencia que no estaba prevista. Me convocaron a hablar frente a especialistas de otra temática de la que iba a abordar. Por respeto al público reformé el discurso que tenía en mente y la finalicé con una pregunta", sintetizó Aquilano al aire de Radio Casilda. Ese disparador lo persiguió varios años, al punto que llegó a contactar a Jack Szostak, premio nobel en 2009 en la rama Fisiología o Medicina.

"Me sorprendió la rapidez con la que me respondió. Fue una plataforma para llegar a otros investigadores", contó el casildense. La teoría que él formuló dicta que la telomerasa puede reactivarse e incluir sobre la prolongación de los telémeros

Para llevarlo al llano, Aquilano explicó con la telomerasa es una encima que deja de producirse al momento del nacimiento de los seres humanos. Esta encima influye sobre los telómeros, las secuencias especiales de ADN que se sitúan en los extremos de los cromosomas, impidiendo que se rompan. Graficándolo mejor, actúan con los plásticos que sostienen las puntas de los cordones de una zapatilla. 

"Cuando nacemos, la telomerasa deja de activarse. Lo que redunda en que los telómeros comiencen a acortarse. Ese efecto produce que el cuerpo humano sea más propenso a la enfermedades de la vejez", detalló el especialista. Pero hay variantes que podrían hacer que los telómeros se alarguen. 

Una de esas posibilidades se generó en la denominada "teoría de los gemelos astronautas". Scott y Mark Kelly. El primero de ellos pasó 340 días en el espacio como parte de una misión y al retornar a la Tierra, lucía "más joven" que su hermano. De hecho, estudios relevaron que los telómeros de Scott habían crecido. Susan Bailey,  investigadora de la Universidad de Colorado a cargo de la investigación, dijo en su momento que la única explicación que podía encontrar era la que formulada por Aquilano.

La semana pasada, intentando comprobar la formulación del casildense, se lanzó a la Estación Espacial Internacional una muestra de Arabidopsis thaliana, una especie vegetal sugerida para analizar sus telémeros. El 20 de julio retornará para ser analizado minuciosamente en tres laboratorios. 

"Podría tener influencia en el tema del cáncer. Porque podríamos hablar de un posible rejuvenecimiento celular", aseveró Aquilano. Quien reveló que quizás antes de que termine el año haya resultados concluyentes.

una buena tarde