Finalizó la conciliación obligatoria dictada por el Ministerio de Trabajo de Santa Fe en el conflicto de la aceitera Ricedal Alimentos de Chabás y 17 trabajadores se quedaron sin trabajo. No obstante, un grupo de ellos mantiene firme su reclamo y se entusiasma con la posibilidad de recuperar el lugar.

“Estamos con un acampe en la puerta de ingreso de la planta sin hacer corte de ruta”, explicó a Radio Casilda el delegado de los trabajadores Lionel Zuliani. De los 24 trabajadores, 17 de ellos se quedaron sin su puesto de trabajo y el resto se acogió al retiro voluntario propuesto por la empresa.

Desde principios de año los responsables de la firma mantienen la firme postura de cerrar las puertas de la aceitera, ya que aseguran que trabajan de manera deficitaria. “Pero nosotros creemos que aún es viable un acuerdo, pero no vamos  a resignar las condiciones. Ellos pretenden rebajar sueldo y condiciones que no son las que nos corresponden”, aclaró el delegado.

Además, expresó que de acuerdo a su visión “esto no es un problema económico sino una persecución del primer día al último”.

La empresa dejó abierta la posibilidad de una reactivación adentro de un par de meses y prometió que los primeros en reincorporarse serían quienes ahora se acogieron al retiro voluntario. “Nosotros entendemos la situación de los compañeros que tomaron esa decisión y no vamos a juzgar a nadie”, dijo al respecto el dirigente.

El delegado destacó el “apoyo constante del Sindicato de Aceiteros” y confirmó que mantendrán firmes el reclamo en el lugar, tratando de tener una respuesta que les permita esperanzarse con la posibilidad de volver a trabajar.