El fútbol doméstico apenas pudo desarrollar la primera fecha en medio de un año que se presumía lleno de acción. Pero la historia quiso que el mundo se quedara quieto para intentar frenar la pandemia del Covid-19. El camino a la reanudación todavía es largo, pero los directivos tendrán que replantear algunos puntos para que la proyección no se estire de más.

En estas últimas jornadas de reflexión, los integrantes del Órgano Ejecutivo tomaron dimensión no sólo de perjuicio económico que significará para los clubes, sino de que es muy probable que se necesite barajar y dar de vuelta. Sin una fecha clara de reapertura, el calendario lucirá compactado.

Una de las primeras posibilidades que surgió, aunque está lejos de ser oficial, es anular el campeonato que largó el 8 de marzo y diagramar otra estructura. Por lo que la primera jornada de este 2020 quedaría sin efecto. Claro está, para eso se requiere autorización del Consejo Federal y luego de la aprobación de las instituciones participantes. La misma suerte podía correr el torneo de las Divisiones Formativas. 

Lo único concreto hasta ahora es que en calle Sarmiento están preocupados por lo que pueda dejar el efecto post-Coronavirus. Los planteles cortaron sus prácticas de forma repentina y el futuro es tan incierto como en cualquier ámbito.