El anuncio del presidente de la Nación, Alberto Fernández, mantuvo la atención en muchos hogares y posó la responsabilidad sobre los gobernadores. El mandamás de Argentina se refirió a regiones en particular donde será necesario el regreso a la fase 1 del APSO. Sin embargo, en el sur de Santa Fe continúa la vigilancia para evitar el desborde.

La ministra de Salud, Sonia Martorano, analizó la curva de casos y las medidas que lleva adelante el gobierno provincial durante la pandemia. "Estamos en alerta para no retroceder de fase", admitió la doctora. Focalizando su mirada, sobre todo, en lo que sucede en ciudades como Rosario y Casilda, declaradas desde hace semanas como de circulación comunitaria.

Al respecto, Martorano trató de poner paños frío ante el aumento de casos que se aprecia y detalló: "No estamos siguiendo un solo parámetro, prestamos atención a los números de contagio, cuando tenemos nuestros adultos mayores o personas vulnerables contagiadas, lo cual implica una tasa de letalidad más alta y seguimos muy de cerca la ocupación de camas críticas”.

En caso de que los factores antes mencionados muestre niveles críticos, la ministra sostuvo que no dudarán en restringir actividades para bajar la circulación en las calles. Por este fin de semana, no se proyectarían cambios aunque no quiere decir que la semana entrante se tenga que modificar la estrategia.

Para cerrar hizo un balance de la situación en la provincia y concluyó: “Nuestro sistema de salud, a esta hora, está dando una buena respuesta y sin ningún inconveniente". Y ponderó que la tasa de letalidad sigue en el orden el 1%. Una cifra aceptable comparada con el promedio del país.