La PDI intervino en la tarde de este miércoles en un local de calle Victoria al 2200 donde se suponía que funcionaba un sitio de apuestas clandestinas. Efectivamente el allanamiento resultó positivo. La tarea de los uniformados duró hasta la noche.

Se trataba de lo que parecía ser una simple vivienda en el barrio Alberdi, aunque en su interior albergaba máquinas de apuestas sin autorización alguna. Del lugar se llevaron un total de 22 computadoras, cinco mil pesos en efectivo  y una fichera. En el momento de la irrupción de las fuerzas de seguridad -a plena luz del día- había al menos cincos personas en el local. Se procedió a la detención de un hombre mayor de edad. 

No es la primera vez que sucede algo similar en la ciudad -o en la región-, dado que marzo del año pasado se llevó adelante un megaopetarivo de 14 allanamientos encomendados por los fiscales Marianela Luna y Juan Pablos Baños. En esa oportunidad hubo diez implicados en la causa y la mayoría de los improvisados casinos estaban funcionados en clubes sociales y deportivos.