Todo fue gente, sillas, bares, música y un domingo con una temperatura agradable sobre las calles principales de Casilda, una ciudad que poco a poco se va adaptando a las nuevas cuestiones sociales. El Paseo Gastronómico funcionó y se ve con buenos ojos que sea algo para seguir planteando más adelante.

Las calles se vieron colmadas, y si bien algunas por horas estuvieron cortadas, eso no importó ya que era por una buena causa. Entre los dueños de bares, restaurantes, heladerías y pizzerías se pusieron de acuerdo y crearon un espacio para el arte culinario y el bolsillo del vecino de Casilda y la región.

Desde las 18 horas con mesas sobre el bulevar Lisandro de la Torre y carteles que anunciaban “Desvio”, el Paseo fue todo un éxito. Tal como lo replicó el dueño de uno de los comercios adheridos en diálogo con nosotros, explicando que “estas cosas, le hacen bien” a la localidad.

Esta modalidad de “Paseo” en la ciudad que busca tejer un hilo entre los empresarios que apuestan a sus proyectos y el bolsillo, las necesidades y también las posibilidades de un consumidor al que ya tanto conocen y al cual buscan darle más opciones.