La noticia causó conmoción por el nivel de privilegios y atribuciones de las que gozaban detenidos a cargo de la Unidad Regional IV de Policía. Si querían hablar desde un teléfono móvil, podían. Si se generaba una pelea y necesitaban usar cuchillos, podían. Es más, si se les ocurría abrir las oficinas de la propia Jefatura, podían. Las llaves estaban en su poder.

Al tanto de tales irregularidades, Marianela Luna las sacó a luz y causó un revuelo importante. De hecho, la cúpula de la policía casildense fue removida. En diálogo con Radio Casilda, la fiscal contó en qué estado se encuentran actualmente las investigaciones realizadas por ella.

“Las causas las trabajé, avanzamos con las medidas e hicimos un informe con todas las irregularidades del personal provincial. El viernes las puse a disposición de la doctora Carina Bartocci, que es la fiscal que específicamente va a intervenir en todos estos delitos de violencia institucional y corrupción. Es una fiscalía creada en Rosario, y el fiscal regional le ha dado competencia para descomprimir un poco los distritos y se haga cargo de las causas donde estaba involucrado personal policial. Pusimos a disposición esa causa sobre irregularidades de funcionarios haciendo un informe respecto de posibles responsabilidades. Está todo trabajado. Lo que hay que evaluar es la responsabilidad penal y formular la imputación”.

El último viernes, la fiscal Bartocci estuvo en Casilda tomando una audiencia imputativa en un caso donde se involucraba personal policial de Pujato. Ella va a intervenir en todos los casos, una vez que la fiscal Luna y su equipo hayan realizado las primeras actuaciones.