Desde el 13 de septiembre Jaquelina Farjat es nuevamente la jefa de la oficina de Ansés Casilda, luego de que el gobierno nacional diera marcha atrás con su intención de sacarla de su cargo. La situación había despertado profundo malestar en la comunidad, que entendió que se estaba cometiendo una injusticia.

A principios de julio se conoció que tras 25 años al frente de la oficina local, Jaquelina había sido apartada y su lugar era ocupado por Beatriz Brandoni, quien fuera candidata a concejal del PRO en la ciudad.

La disconformidad de distintos representantes de la comunidad y el gremio obedecía a dos puntos: la injusticia de sacar a una de las trabajadoras más eficientes y que contaba con reconocimiento unánime en su sector, y el reemplazo postulado por cuestiones de índole política.

Las voces se alzaron desde el Centro de Jubilados, la Asociación del Personal de los Organismos de Previsión Social (Apops), incluso militantes del PRO en la ciudad, y cientos de vecinos, quienes coincidían en que se estaba cometiendo una injusticia.

Cabe destacar que Jaquelina no fue sacada del organismo sino que pasó a ocupar otra tarea de menor rango, aunque con la reducción de los beneficios que esto significa.  

Finalmente, luego de dos meses, se decidió que Farjat vuelva al cargo que viene desempeñando desde hace 25 años con eficiencia. Así fue recientemente notificada. En tanto que Brandoni sigue trabajando en Anses Casilda pero en otra área.

Jaquelina decidió no hacer declaraciones a la prensa luego de su restitución y solo se limitó a agradecer las innumerables muestras de apoyo de la comunidad casildense.