El gobernador de Santa Fe Miguel Lifschitz encabezó este miércoles en Cañada de Gómez el acto a través del cual se bautizó a la obra hídrica de la presa del arroyo Cañada de Gómez como “Santo Padre Francisco”.

“Celebramos esta obra y su nombre”, dijo Lifschitz en su mensaje durante la ceremonia de la que participaron la intendenta Stella Clérici y el arzobispo de Rosario, Eduardo Martin.

“Se trata de un proyecto importante, una obra inteligente porque retiene el agua para que no llegue a la ciudad y desagota lentamente sin producir daño alguno. Por lo cual es una protección fundamental para Cañada de Gómez, sobre todo después de las inundaciones que sufrió la ciudad en el año 2000”, señaló.

En relación al nombre elegido para la presa, el gobernador expresó que el Papa Francisco “es un líder no solo espiritual sino que orienta al mundo, una voz autorizada que nos habla de paz, esperanza, inclusión y convivencia, y a quienes tenemos responsabilidades de gobierno nos marca un faro”.

La intendenta Clérici calificó a la obra como “una reparación histórica para miles de vecinos de Cañada de Gómez”.

La presa de retención, construida en el marco de la obra de sistematización de drenajes superficiales del arroyo Cañada de Gómez, ubicada al suroeste de la ciudad, es una obra que consistió en la canalización del arroyo en el tramo urbano, la realización de una presa de contención y la reformulación de los puentes.