A través de un nuevo decreto provincial, el Ejecutivo de Omar Perotti amplió la posibilidad de concurrencia a las actividades religiosas en iglesias, templos y lugares de culto, correspondientes a la Iglesia Católica Apostólica Romana y entidades religiosas inscriptas en el Registro Nacional de Cultos.

La nueva reglamentación tiene pautas básicas a cumplir. El horario de realización de dichos actos debe comenzar a las 9 y no exceder las 20. Todos los concurrente deben hacerlo utilizando elementos de protección de nariz, boca y mentón. Además, hay que asegurar la permanente ventilación de los espacios cerrados y respetar densidad de ocupación de una persona cada dos metros cuadrados de espacio circulable.

En cuanto a los aforos cerrados, en principio, puede tener un máximo de superficie ocupada del 30%. Aunque es posible una ampliación del 50% conforme las características del lugar, previa aprobación de las autoridades sanitarias.

Entre las celebraciones se exige una pausa adecuada que permita la desinfección del local y de los elementos de uso habitual, previo a la realización de la siguiente ceremonia programada. De ser posible en el recinto, deberían señalizarse los ingresos y egresos de forma diferenciada.

Además, el decreto aclara que las autoridades municipales y comunales, en concurrencia con las autoridades provinciales competentes, coordinarán los procedimientos de fiscalización necesarios.