No todo es malo, menos aún en tiempos donde una pandemia, justamente, nos maneja los tiempos. El 14 de marzo fue la última vez que docentes y alumnos se vieron con la profesora Vanesa Arias, de la Academia Amanecer Danzante, es que a partir de ese momento todo fue cuesta arriba y las cosas cambiaron mucho.

Dado que se les ha complicado poder llegar hasta acá, que este lunes 9 de noviembre puedan volver a recibir a un minúsculo grupo de personas, es poco más que una gota de agua en el desierto. Es poder, en parte, volver a sentir y a vivir la danza como deben y quieren, sin pantallas u otros elementos de por medio.

En diálogo con CasildaPlus.com, la profesora Vanesa Aeias, contó: "Después de casi ocho meses volvemos a las clases presenciales en nuestro salón. Este año no nos imaginábamos que íbamos a tener esta pandemia y que íbamos a frenar todo".

Siguiendo con su relato, explicó que "en mayo cumplimos 20 años con Amanecer Danzante y teníamos previstos un montón de eventos y festejos", de todos modos, las cosas han tomado otro rumbo, e incluso "no pudimos durante todo el transcurso de tiempo, dictar clases de otra forma ya que muchos de nuestros alumnos no contaban con los recursos tecnológicos para el dictado de clases, nuestra última clase fue el 14 de marzo", agrega Arias.

Al no contar con un salón propio, deben alquilar un local, por lo que durante el paso de la pandemia y sin poder tener ingresos, tuvieron que tomar otro camino. "Durante todo este tiempo realizamos venta de pastelitos, hemos tenido que vender entre 60 y 65 docenas para sustentar el alquiler", indica. 

En lo que respecta a las formas con las que se debe volver a la actividad, detalló: "Con todo un protocolo, diferentes horarios y con grupos muy reducidos pero con mucho entusiasmo y las mismas ganas con las que habíamos empezado en marzo".

"Nos hemos dedicado a marcar todos los espacios con cruces y el distanciamiento necesario para poder desarrollar nuestras clases", insiste la entrevistada, y suma que "en la entrada vamos a cumplir con el protocolo requerido, toma de temperatura, higienización de manos y pies con alcohol, vamos a completar una planilla y sobre todo mucha responsabilidad". 

Luego de tanto tiempo, Vanesa Arias, Mara Aquilano, Eequiel Farias y Xavier Flores, equipo de enseñanza completo, tendrán dos grandes requerimientos: entregar su saber por un lado, y lograr que se puedan llevar a cabo las medidas preventivas vigentes para evitar todo tipo de riesgos, por el otro.