Las fuerzas policiales intensificaron su accionar desde que el presidente de la Nación Alberto Fernández decretó el aislamiento social, preventivo y obligatorio. Su función además de lo preventivo, es controlar a las personas que circulen por la vía pública en tiempos de cuarentena. Este fin de semana no fue la excepción: 56 personas quedaron a disposición de la justicia por no cumplir con su deber actual de quedarse en casa.

Quienes no puedan justificar estar fuera de su hogar y no tengan habilitación dentro de las tareas exceptuadas por el primer DNU de la cuarentena, terminan su día en el patio de la Unidad Regional IV mientras se concreta la averiguación de antecedentes y se realizan los procedimientos administrativos vigentes con una demora aproximada de 12 horas. Además de que se le abre una causa judicial a su nombre que deberá afrontar una vez cese la cuarentena.

El patrullaje policial es constante, es por eso que sus registros son los siguientes: durante el fin de semana, desde el viernes a la hora 20 y hasta el lunes a las 7am, un total de 56 personas fueron demoradas en la vía pública y llevadas hasta la seccional policial. Los números mermaron pero todavía hay quienes no respetan y elijen salir a incumplir con la ley.

Durante la noche de domingo en el habitual parte epidemiológico de la Provincia, el gobernador Omar Perotti aseguró seguir trabajando y velando por la seguridad, prevención y valor de la vida por sobre la economía de Santa Fe. Con esto se demuestra que la necesidad de evitar personas circulando es una decisión que no solo radica en la ciudad y surge aquí, sino que atiende a poderes e intenciones nacionales y provinciales.