La terminal de ómnibus de Casilda volvió a convertirse el punto de encuentro de una asamblea popular. Esta vez, contó con menos asistencia y una notoria baja en la tensión que se demostró en las últimas horas del viernes y las primeras del sábado.

El anuncio más saliente lo realizó Juan José Sarasola. El Intendente anunció que la Municipalidad será querellante en la causa iniciada contra la empresa Monticas tras el siniestro vial que tuvo lugar en la ruta 33. Además, se sumó al pedido de la gente que a gritos, reclama por la presencia de los funcionarios provinciales del área de transporte.

Aún estando bajo el mismo signo político, Sarasola remarcó que es necesaria el arribo de Pablo Jukin, y de Gustavo Peirano, su lugarteniente en la Secretaría de Transporte. Ambos, deben dar explicaciones en función de las promesas que venían realizando desde hace meses.

La comunidad educativa de la Facultad de Veterinarias dependiente de la Universidad Nacional de Rosario también se hizo presente, marchando por Ovidio Lagos, desde el predio de ruta 33. Exigieron justicia para las víctimas, esclarecimiento de la causa, mayor seguridad en los viajes y un cara a cara con autoridades de Santa Fe.