El secretario general del gremio estuvo en contacto con Helport, la firma que tiene la concesión del peaje Casilda-Pujato y le confirmaron que los empleados continuarán trabajando con normalidad durante el mes de julio. De todas maneras, la incertidumbre y las desprolijidades no le quitan preocupaciones a los trabajadores.

La semana pasada el delegado local de Sutracovi, Néstor Farías, había mostrado su descontento ante la falta de información que había al respecto cuando se acercaba la fecha límite del supuesto fin de la concesión. Finalmente, la firma pidió una prórroga hasta el miércoles 1 de agosto porque "todavía no se definieron las oficinas y la razón social que llevarán los nuevos dueños".

Ante este nuevo contratiempo, el sindicato solicitó una reunión en carácter de urgencia con las autoridades de Helport. Porque si bien tuvieron una novedad luego de esperar un tiempo prolongado, se siguen dejando de lado detalles importantes. Como ser, donde quedarán varados los empleados que actualmente atienden las cabinas y que sucederá con el mantenimiento de una traza significativa de la región como lo es la Ruta Nacional 33.