A media mañana un Chevrolet Aveo quedó incrustado en plena calzada. Circulaba por bulevar Villada en dirección hacia barrio San Carlos, y cuando cruzaba la esquina de España, la propia calle lo detuvo. Es que el cemento fresco de la obra de repavimentación, trabó sus ruedas.

Hace meses que en el lugar se lleva a cabo la obra de ampliación de la red cloacal hacia Nueva Roma, pero según jura la conductora, la calle estaba abierta y no había señales que indiquen cemento fresco en la calzada. Por eso circuló y se encontró con tamaña sorpresa.

Los operarios estaban colocando el cemento y vieron como la rueda delantera izquierda del auto, quedó incrustada. Según la mujer que conducía, tras el incidente la ayudaron a sacar el vehículo del pozo, y más tarde colocaron la valla correspondiente.

La conductora estaba acompañada de una niña y ninguna de las dos sufrió lesiones. Tampoco el auto pareció tener impactos, aunque se deberá constatar si el cemento le produjo alguna avería que impida su normal funcionamiento.