Pasar caminando frente al municipio en horario nocturno no es una tarea recomendable por estos días. Tras las fallas eléctricas provocadas por la tormenta del último domingo, las lucen brillan por su ausencia.

La Plaza de los Mástiles quedó completamente a oscuras. Es un punto neurálgico de la ciudad dado que se dictan clases para adultos y es un sitio de alta concurrencia después de las 20 horas.

La problemática se traslada al tránsito vehicular. Los semáforos de las esquinas de Buenos Aires y Ovidio Lagos dejaron de funcionar. Tanto el que está ubicado hacia la zona de la terminal, como el que da espaldas a Lisandro de la Torre y el restante que marca el paso hacia la zona más comercial de la Buenos Aires.

Esos semáforos son vitales dado que organizan una zona de alta congestión de autos y motos y están estratégicamente ubicado en esquina que ordena y protege la llegada y salida de los niños que concurren a la escuela Casado.