El domingo fue de definición y como tal se vivió con el corazón latiendo muy fuerte y los ojos puestos en dos canchas de la región que tenían acción. El en Nuevo Charquito, Belgrano llegaba con una ventaja que parecía tranquilizadoras. Mientras que Pujato tenía que ganar en Cemento Antonio Saraceni. Los resultados fueron sorpresivos.

En Arequito, el Azul recibió a Unión Casildense. A pesar de que en el partido ida, los de Borri habían ganado por 2 a 1, esta vez fue el Trico el que se llevó la gloria. Con tres goles del intratable Lucho Acosta, se ganó un lugar en la final. Uno tanto mejor que otro, dos de tiro libes para silenciar a los hinchas de La Pantera.

Por otro lado, en el Cemento, donde todo terminó desmadrado, los de Horacio Vailatti le ganaron 2-1 a Atlético Chabás. El cotejo terminó con incidentes en la zona de vestuarios antigua, los hinchas del León terminaron enardecidos con el juez principal. La tarde la abrió Agustín Musso, de penal. Minutos después, amplió David Rolón. En el epílogo llegó el grito de David Guffanti, para darle emoción.

Con estos resultados, Unión Casildense se medirá ante Atlético Pujato por el lugar en la finalísima. Como en el segundo semestre de 2016. Por su parte, Unión Deportiva sigue esperando por el choque cumbre.