Otra vez agua. Lo que pronosticaba el Servicio Meteorológico Nacional, se cumplió. El verano se estrenó con un cielo nublado y desde el mediodía comenzaron a darse los chaparrones en algunos sitios las y tormentas, algunas fuertes en la región.

Si bien el vientos fue cambiando desde el sector norte al sector sur, y hubo esporádicas ráfagas fuertes, los truenos y rayos fueron una constante del mediodía de Casilda y la zona. Tal situación implica que el alerta meteorológico esté vigente.

El área continuará siendo afectada por lluvias y tormentas, algunas localmente fuertes, pudiendo presentarse intensas ráfagas, ocasional caída de granizo, fuerte actividad eléctrica y abundantes precipitaciones en cortos períodos. 

Se estima que el clima inestable se sostenga hasta el viernes por la noche, pero la buena noticia es que mejoraría en la mañana del sábado. Durante el 23 y pensando en el domingo 24 el cielo estará despejado. Para la nochebuena, todo indica que se podrá cenar bajo las estrellas.