Tras el aumento de casos y la aparición de la variante Ómicron, el Ministerio de Salud de la Nación anunció la reducción de los días de aislamiento para personas con esquemas completos de vacunación contra el coronavirus.

Las provincias tendrán la potestad para adaptar las medidas de acuerdo a la situación epidemiológica.

En conferencia de prensa, la ministra de la cartera, Carla Vizzotti, afirmó que los contactos estrechos, asintomáticos, con las dos dosis de vacunas aplicadas, deberán aislarse durante cinco días y atenuar los cuidados.

En cambio, quienes no posean vacunas o cuenten con una sola dosis, deberán permanecer diez días recluidos.

Las personas que den positivo y estén vacunadas deberán aislarse siete días y luego realizarse un PCR; y de no estarlo, o poseer el esquema incompleto, deberán realizar una cuarentena de diez días.

Vizzotti aclaró que la medida, que regirá a partir del jueves, se tomó en base al avance de la vacunación, y a la nueva cepa que, a pesar de ser más transmisible, es de menor letalidad.

"Estamos viendo un aumento exponencial del número de casos, pero al momento no tenemos una traducción de ese número de casos en aumento de internaciones y de la mortalidad", afirmó la ministra.

A diferencia de su par bonaerense, Nicolás Kreplak, la funcionaria aseguró que el COFESA está trabajando en la futura implementación del auto-test para registrar la detección de los contagios de coronavirus.

También, destacó que la reducción temporal de las dosis de refuerzo no facilitará la reducción de casos, sino que permitirá una disminución en la letalidad.

A mayores de 60 años y al personal de salud, la dosis de refuerzo será aplicada a cuatro meses de haber completado el esquema, mientras que para el resto de la población será a cinco meses.

La titular de la cartera de Salud destacó que la Argentina, en concordancia con Sudamérica, están iniciando la tercera ola, mientras que "otras regiones del mundo están viviendo en su mayoría una cuarta ola" de la pandemia.