El personal de inspectores municipales, con la colaboración de efectivos de la URIV, estuvieron abocados el pasado domingo a la madrugada a controles de alcoholemia en el radio céntrico de Casilda. En el transcurso de esas horas se detuvieron a 79 conductores, uno de ellos huyó del lugar luego de dar positivo. Dejando en mano de los controladores toda la documentación que le permite transitar.

Según la información que se vertió desde la oficina municipal, hubo siete personas que manejaban su vehículo con valores que iban desde los 0,83 a 1,94 puntos de etanol en sangre. Por consecuencia, se labraron ocho actas de infracción y se secuestraron dos automóviles. 

Pero lo más llamativo sucedió con un automovilistas que dio positivo en el control y se negó a bajar del vehículo. Por el contrario, decidió darse a la fuga, esquivando el operativo montado y hasta poniendo en peligro a las personas que circulaban por la zona. Lo cierto es que en su desespero dejó en mano de los inspectores su licencia de conducir y la tarjeta verde del rodado. Por lo que está totalmente identificado.  

Vale aclarar que el límite de alcohol en sangre sancionable para automovilistas es de 0,50. En el caso de los motociclistas se tolera hasta 0,20. Y los encargados de manejar el transporte público de pasajeros posee una tolerancia cero.