El pasado viernes fue noticia porque un ladrón ingresó al patio de una vivienda de calle Alvear al 2100 y tras ser divisado por la moradora, -una funcionaria de la justicia de Casilda-, intentó escapar pero personal de la Unidad Regional IV logró capturarlo.

Como si esto fuera poco, durante la madrugada del sábado una denuncia de jóvenes en la vía pública llegó a la Jefatura. Uniformados se dirgieron hasta barrio Nueva Roma y, siguiendo las coordenadas que le habían mencionado vía comunicación telefónica, dieron con dos individuos menores de edad que intentaban abrir las puertas de vehículos estacionados.

De inmediato se procedió a trasladarlos a la sede policial ubicada sobre calle Zeballos al 2100. Lo llamativo es que al tomar sus datos y concretar con los procedimientos burocráticos pertinentes (ambos menores), se conoció que uno de los demorados era hermano del delincuente que había sido atrapado "con las manos en la masa" horas antes en el domicilio de calle Alvear al 2100.

Problemas habituales...

Teniendo en cuenta el responsable del robo a la funcionaria, vale aclarar que el sujeto hace apenas unos días había conseguido su libertad tras estar en prisión por otros problemas judiciales. Según pudimos saber desde Casilda Plus, muchos de los delitos tienen que ver con el accionar de las mismas personas, transformándose en reincidentes.