La jornada de este lunes resultó agitada en el seno de la Jefatura de Policía de Casilda. Puesto que un grupo de internos no accedieron al pedido de requisa y encabezaron una revuelta que se extendió por algunos minutos. Llegaron a incendiar un colchón y causaron alboroto hasta que los uniformados intervinieron con la utilización de extintores.

Los disturbios se iniciaron en un pabellón en el cual están alojados nueve presos que se negaron a ser revisados en sus celdas. Una practica que suele ser bastante habitual, según detallaron fuentes de la URIV. Sin embargo, esta vez en particular se mostró una hostilidad inesperada.  

La rebelión de los internos llegó al punto de que fue necesaria la presencia de la misma jefa de la unidad, Emilce Chimenti, y de efectivos del GOT. La parte más compleja fue incendiaron un colchón para crear una cortina de humo. Aunque el fuego no se propagó y pronto se controlaron los ánimos.

No hubo que lamentar heridos y finalmente la requisa se llevó adelante tal cual estaba estipulada. Vale recordar que actualmente están alojados unos 42 detenidos en la unidad que comprende a todo el Departamento Caseros.