Las primeras discusiones del año se enfocaron en el salario docente. De un lado, se demandaba un 25% de aumento y la aplicación de la cláusula gatillo, mientras que del otro lado el Gobierno Nacional ofreció un 15% y avisó no va a ejecutar las partidas atrasadas. La última de 2018 llegó a fines de abril y de allí en más, no hubo ni habrá garantías de pago. Ahora el debate se instala en la continuidad de la universidad pública como modelo educativo en la Argentina. Por tal motivo, no hay actividades en la Facultad de Ciencias  Veterinarias de nuestra ciudad.

Alrededor de 40 universidades de todos los rincones de nuestro suelo están de paro, y la semana próxima se sumarán las del resto del país. En ese esquema, los alumnos que cursan los estudios en Casilda, tanto los del nivel terciario como los de la Escuela Agrotécnica, ven interrumpidos sus estudios.  

El pedido de aumento de las partidas no sólo se centró en el salario docente sino también en la compra de útiles y materiales para laboratorios y elementos de seguridad en talleres para desarrollar las tareas. Es decir, condiciones que garanticen el dictado de las clases.

Este miércoles, los docentes se reunieron frente a la sede universitaria de Rosario y en nuestra región, la medida se replicó en la plaza de Zavalla, donde tiene asiento la Facultad de Agronomía. Este viernes, todas las facultades que dependen de la Universidad Nacional de Rosario se concentrarán en el frente del Mercado del Patio, de cara la terminal de ómnibus Mariano Moreno, en Caferatta, entre Santa Fe y Córdoba.

El 24 de agosto habrá un Plenario de Secretarios Generales para estudiar las propuestas de continuidad aunque todo indica que se radicalizará la lucha si es que el gobierno nacional no brinda respuestas. Hoy se discute no sólo el ciclo lectivo, sino la continuidad de las universidades públicas como modelo educativo de nuestro país.