El propietario de un Honda Civic color gris oscuro lo había estacionado justo enfrente de los locales donde funcionan muchas de las dependencias municipales. Al retornar, no encontró el rodado y la desesperación lo invadió. Fue durante la mañana del jueves, entre las 10 y las 11.

La víctima del robo sería una persona mayor que circulaba con sentido hacia el barrio Nueva Roma por la principal arteria que tiene la ciudad. En el apuro dejó las llaves puesta en el auto y pocos minutos después no estaba. Luego de examinar los alrededores, se vio obligado a radicar la denuncia en la Jefatura de Policía local.

Según se pudo saber, el Honda Civic tenía el tanque de nafta suficientemente cargado como para realizar una huida de varios kilómetros. Por lo que no se descarta que se encuentre fuera del radio urbano de Casilda.

El robo de este automóvil se suma al que sustrajeron la semana pasada en un galpón de barrio Barracas. A diferencia de aquella ocasión, en este caso se trataría de una situación más de oportunismo.