El viaja dejó de ser un placer desde hace tiempo. Sobre todo para aquellos que requieren de tomarse un colectivo -o dos- para estudiar o ejercer su labor fuera de la ciudad de origen. La Provincia le dio luz verde a  otra suba en la tarifa del interurbano y las quejas los usuarios no se hicieron esperar. Héctor Zanda, subsecretario de Transporte de Santa Fe, trató de explicar a que responde el reciente incremento.

"A lo largo de estos siete meses la inflación siguió creciendo. Y los lubricantes y combustibles no están exentos de esta situación. En esta oportunidad se trata de una readecuación al contexto actual", refirió el funcionario en diálogo con Radio Casilda. Al mismo tiempo trató de diferenciarlo de lo ocurrió en el mes de enero, cuando la quita de subsidios por parte del Gobierno Nacional, disparó una elevación del 35% en los pasajes. Pese a que la Provincia aportó 1500 millones de pesos para atenuar el efecto, no resultó suficiente. 

"Aumentar un tarifa del cualquier servicio público no es grato para ningún usuario. Pero no lo podemos sostener", continuó Zanda. Quien reveló que en la reciente actualización del 23% se incluye el salto que tendrán los salarios de los choferes en agosto según los acordado en mesa paritaria. 

La Provincia posee un sistema de control aportado por la Universidad Tecnológica de Santa Fe, que se revisa periódicamente y que incluye variables de costos para el transportes metropolitano, de corta, media y larga distancia. La actualizaciones se realizan por promedios para evitar que algunas zonas sufran más el golpe ue otras.

¿Alguna buena noticia? Para los usuarios que se manejan con la Tarjeta SUBE, el aumento no se reflejará hasta que se readapte el sistema.