El 8 de febrero de 2021, Úrsula Bahillo de 18 años fue asesinada por el policía bonaerense Matías Martínez. El femicida fue condenado a perpetua pero el dolor no para. 

Hoy se cumple un año de aquel día en que la comunidad de Rojas quedó conmocionada frente al femicidio de una joven de la ciudad. Úrsula no fue una más, ni para su gente, ni para todas las mujeres del país quienes diariamente luchan contra esta problemática e intentan visibilizar todas las aristas. 

Matías Martínez era policía de la bonaerense. De acuerdo a los datos obtenidos por diferentes observatorios de violencia de género, gran porcentaje de los femicidios son perpetrados por un agente de alguna fuerza de seguridad. Según CORREPI, son el 20%.

Martínez, al ser detenido, declaró que había asesinado a Úrsula de 15 puñaladas "en defensa propia". El cuerpo de Úrsula fue hallado cerca de las 20.30 entre unos pastizales en un campo ubicado a la altura del paraje Guido Spano, a 13 kilómetros de Rojas.

Dos semanas después del femicidio, Matías Martínez fue condenado a cuatro años de prisión por lesiones y amenazas agravadas a otra ex pareja. Otra mujer había tenido la valentía de denunciarlo y la justicia, con sus tiempos interminables y su falta de accionar, dejó que siguiera transitando por la calle.

Tanto Úrsula como su mamá habían realizado también denuncias contra el femicida que no fueron debidamente escuchadas. Por eso la familia apunta contra la justicia. 

En diciembre de 2020, tras una cámara gesell, confirmaron que Martínez había abusado de una persona con capacidades diferentes pero el juez Marcelo Romero, subrogante del Juzgado 1 del Departamento Judicial de Mercedes estaba de vacaciones y no lo detuvo.

También apuntan contra Luciano Callegari, juez de Paz de Rojas quien desestimó todas las denuncias realizadas. Además, aseguran que aprobó el otorgamiento del botón de pánico un día después del crimen de Úrsula.

Madres y Padres del Dolor se reúnen este martes a las 18:00 en el centro de la ciudad, habrá una congregación y luego una misa.