Nuevamente al igual que casi todos los fines de semanas, policías de la Unidad Regional IV debieron intervenir en fiestas clandestinas y terminar con estas. En primera instancia se culminó con un encuentro en Casilda donde había unas 200 personas, y, luego en Los Molinos, donde el total de asistentes rondaba las 60 personas.

"Personal policial de la Subcomisaría 1era. de Los Molinos, tomó conocimiento que en calle Güemes al 300 de esa localidad, se estaría llevando a cabo una Fiesta Clandestina, arribados al lugar se pudo constatar alrededor de 60 jóvenes en el interior de una edificación en construcción", anunciaron fuentes oficiales mediante un comunicado.

Además, sumaron que "al percatar la presencia policial comienzan a retirarse en diferentes direcciones". De todas formas, los efectivos que se llegaron hasta mencionada dirección pudieron dar con el organizador del evento y culminar con todo lo que estaba sucediendo.

"Se logra entrevista con el organizador de la misma siendo éste mayor de edad, quien accede a detener el accionar y luego se retira juntamente con las demás personas", indicaron en el escrito presentado. Vale aclarar que por el momento no se permiten los encuentros masivos en domicilios particulares.