Personal de la Unidad Regional IV trabajó en horas de la tarde de este martes en un hecho de robo de cables de un acoplado que estaba estacionado en un terreno baldío de la ciudad. Un hombre se percató que otras dos personas estaban haciendo algo fuera de la ley y decidió avisar a un patrullero que recorría la zona.

Es por eso que efectivos detuvieron la caminata de los dos sospechosos resultando ser ambos, menores de edad. Luego de una requisa de rutina pudieron determinar que contaban con una bolsa que en su interior contenía recortes de cables de distintas medidas.

Luego, en sede policial y con la presencia de dos testigos, confirmaron que correspondían al acoplado de una mujer que reconoció ser la víctima del delito. El hurto se dio en Cerrito y Fray Luis Beltrán.

éstos llevaban consigo una bolsa la cual en su interior había recortes de cables de distintas medidas, los cuáles en sede policial y en presencia de dos testigos, se detallaron los mismos para el correspondiente secuestro. Paralelamente a la requisa, se apersonó una mujer, quién manifestó ser la propietaria del acoplado, y quien reconoció los cables que se encontraban dentro de la bolsa como de su propiedad.