La velocidad con la que circulan los autos y motos frente a las escuelas se convierte en un problema cuando no se respetan las normas. Si bien, generalmente hay agentes de tránsito en los horarios de ingreso y salida de chicos, es bueno tomar otro tipo de precauciones.

Puntualmente en Lisandro de la Torre y San Lorenzo, se modificó el reductor de velocidad. Este viernes por la mañana, trabajadores municipales quitaron la antigua loma de burro de cemento para colocar topes de elevada resistencia al tráfico de vehículos pesados. 

Similares a los que están instalados sobre el asfalto, en los metros previos a las estaciones de peajes, estos apliques cumplen la función de hacer respetar la velocidad en la cuadra, ya que por mas multas y carteles indicativos que figuran mencionando que la velocidad máxima permitida, son pocos los automovilistas que cumplen la regla, lo cual implica un riesgo muy grande para todos los niños y familiares que acuden diariamente a las escuelas.

Esta medida, actualizada a los tiempos que corren en su forma, obligará a los conductores a reducir la velocidad para no dañar su vehículo y los alertará si no habían visualizado previamente las indicaciones.