El ingeniero Roberto Quinteros, persona muy interiorizada en el seguimiento de los servicios públicos, realizó una guía rápida para los usuarios residenciales de la Empresa Provincial de la Energía. Su explicación trata de dejar las cosas un poco más claras a quienes no comprenden porque existen tantas diferencias de facturación de un domicilio a otro, o de un bimestre al siguiente.

Lo primero que se debe realizar con la boleta en mano, es saber que está divida en dos partes. En el margen izquierdo figuran los datos del cliente, de medición y consumo, de la evolución histórica, así como también el período facturado. Mientras a que la derecha, se encontrarán con el monto a pagar y los detalles de cada ítem.

Vamos a primero al lado izquierdo. En la parte superior está la dirección del suministro y otros detalles que son relevantes para la empresa. Justo debajo de esos cuadros, figura el tipo de tarifa que corresponde. Algo muy relevante porque marca en que segmento tarifario se encuentra ese domicilio: N1, N2 y N3. Los N1 ya no cuentan con los subsidios del Estado, en tanto que los N2 y N3 tienen una tarifa especial hasta un cierto nivel de KW consumidos.

Un poco más abajo, el usuario tienen los datos para transferencia bancaria. No vienen al caso. Y justo a continuación, van a encontrar el consumo total del bimestre medido en KW. Esa cifra también es totalmente importante, porque permite compararlo con los bimestres anteriores. De hecho, cada factura de la EPE muestra el consumo de los últimos seis bimestres.

Finalmente, se encuentra el período facturado. Detallando los días sobre los cuales se hizo ese cálculo y, si correspondiera, también se aclara el cuadro tarifario por segmento. Esto se hace ya que las actualizaciones de tarifa pueden darse en medio de los períodos. Por ejemplo, las próximas facturas tendrán contabilizados dos cuadros. El primero de ellos desde el 15 de febrero hasta el 1 de marzo, y posterior a esos días, con la actualización del 39% que se aprobó en audiencia pública.

Pasamos ahora al margen derecho, donde se encuentran los detalles de facturación. El primer ítem es la cuota el servicio, un monto fijo que se abona aunque no se haga ningún uso del servicio. Luego vienen los KWh consumidos por segmentación, dependiente de cada usuario, tiene un valor definido en tres partes: Primeros KWh, Segundos KWh y Últimos KWh. Cada categoría va aumentando su valor. Finalmente está la bonificación por segmentación tarifaria, si correspondiera.

Hasta allí se deduce un importe. Pero a ellos se le agregan los impuestos o subtotales. ¿Qué incluye eso? Cuotas por leyes y alumbrado público, más el IVA y la ley de Energías Renovables.

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LA CLAVE: EL CONTROL

Suena bastante complicado y lo es. Sin embargo, también existen herramientas que los usuarios tienen a sus disposición para medir sus consumos y calcular los posibles importes. Para que nadie se sorprenda y para que no aparezca nada fuera de lo normal.

La EPE posee un Simulador de Consumo. Un calculador sencillo que además de dar datos certeros de los consumos de muchos electrodomésticos básicos, permite saber cual es el estimativo de KWh que se proyectan en un mes. Sólo hay que completar datos de horas utilizadas por día de cada aparato y esperar el resultado.

Además, también hay un Simulador de Importe. Con los datos obtenidos del cuadro anterior o simplemente haciendo una comparación con bimestres anteriores, el usuario pueden anticipar el monto el pesos que le podría corresponder abonar en los siguientes meses.