Una mujer de la localidad, que prefirió mantener su anonimato, prestó su testimonio acerca una situación poco agradable que le tocó vivir al recibir la más reciente facturación de la EPE. El domicilio que habita tuvo una sobrevaloración de más del doble del consumo real. Mientras que también quisieron cobrarle por una propiedad en construcción que está frenada hace más de un año.

La víctima pudo comprobar la gruesa equivocación al mirar su medidor y compararlo con lo que figuraba en la boleta, números completamente disímiles. Por eso, tomó un foto del artefacto el domingo 15 de julio y se dirigió hasta la oficina local.  "No fue culpa de los empleados de acá, figuraba bien lo que ellos habían tomado pero el problema venía de la oficina de Rosario por un error de tipeo", contó la mujer en los micrófonos de Radio Casilda.

Eso no fue todo, porque la misma persona tuvo un segundo caso aún más llamativo. Intentaron facturarle 210 kilowatts de consumo en un terreno baldío que no tiene actividad hace más de un año. En ese mismo lugar, había tenido problemas hace tiempo porque un panal de avispas hizo correr el medidor y se registraron 25 kilowatts. Hago absolutamente irrisorio.

"Quiero aclarar que me solucionaron el problema, no sin antes recibir algunos tratos que no me gustaron. Pero me dura la bronca y además es una forma de advertirle al resto de la población", admitió la víctima. Para sumarle más leña al fuego, el año pasado, la misma familia tuvo inconvenientes similares, aunque en ese caso pagó en disconformidad porque no tenían las herramientas necesarias para comprobar otro posible error.