Enmarcados en la pandemia, el Gobierno Nacional aconsejó a todos los argentinos y residentes, en especial a los que pertenecen a grupos de riesgo, que no viajaran al exterior para tratar de evitar el ingreso al país de la variante Delta de coronavirus o cualquier otra cepa que no tiene circulación comunitaria en nuestra país. 

Sin embargo, fueron miles los argentinos y las argentinas que han salido de nuestro territorio por diversas razones y que ahora están esperando poder ingresar nuevamente al país ya que, en un primer momento, se había fijado un tope de tan solo 600 personas habilitadas a aterrizar en Argentina diariamente.  

Esta medida de prevención fue duramente criticada no solo por los pasajeros sino por todas las aerolíneas que incluso vaticinaban que el regreso de la totalidad de los argentinos varados en otros países podía tardar hasta cinco meses. 

Pero este viernes, el gobierno nacional anunció que se incrementará el número de personas habilitadas al ingreso. Así, habrá 5.200 plazas disponibles para la semana del 10 al 16 de julio, 6.300 para la del 17 al 23 y 7.000 para las semanas del 24 al 30 de este mes y la del 31 de julio al 6 de agosto.

También se permitirá el ingreso desde Uruguay de dos buques de pasajeros semanales, con aforo de hasta el 50 por ciento.

Cabe aclarar que quienes regresen desde el exterior estarán obligados a aislarse en los lugares que determinen los gobiernos provinciales y de la Ciudad de Buenos Aires (CABA) durante 10 días, contados desde el testeo realizado en el país de origen; y la estadía en los lugares de aislamiento estarán a cargo del pasajero.

Se controlará que quienes regresaron de viaje estén cumpliendo el aislamiento en sus domicilios y se radicarán denuncias penales en caso de verificarse el incumplimiento del aislamiento.