Ni bien anunció que había llegado a Casilda, Raúl Daz comenzó a escuchar pedidos y reclamos de los trabajadores. El secretario general de ATE-Rosario estuvo en la ciudad entre la mañana y el mediodía del martes y se reunió con quienes se desempeñan en el San Carlos y en las diferentes escuelas de la ciudad.

En torno a la falta de personal, se buscará implementar una nueva instancia de creación de cargos. Se va a hacer una relevamiento de los cupos que faltan cubrir para luego elevarlos al Ministerio de Salud en próxima reunión con las autoridades.

De parte de los empleados estatales hay una notoria disconformidad con la implementación de la cláusula gatillo. Por ende, lo que se les exige a las autoridades provinciales es que se reabra la paritaria salarial. Teniendo en cuenta la devaluación del peso y los aumentos de los servicios, la aplicación de la cláusula no termina siendo satisfactoria dado que se calcula solo con el índice de precios del consumidor y hay rubros que quedan afuera.

De hecho, los asistentes escolares denunciaron que con la cláusula gatillo cobraron de 60 a 120 pesos más que antes, es decir, un aporte casi nulo. Y además, manifestaron que hay un aumento en la cantidad de chicos en los comedores de las escuelas y se están recortando los montos de las partidas para asistirlos.

En relación a todas estas problemáticas, el jueves habrá una votación en el plenario general que se realizará en Rosario donde se definirán las medidas a tomar.