La localidad de Chabás recibió $100.000 de gobierno provincial como fondo de Emergencia Hídrica por ser una de las tantas localidades afectadas por las constantes lluvias del último tiempo. En diálogo con CasildaPlus.com el presidente comunal Lucas Lesgart dio detalles de los trabajos que se realizan y como se encuentra el distrito.

“Las últimas lluvias afectaron a aproximadamente un 20 por ciento el casco urbano de la localidad, cuando antes se complicaba el 80. Los trabajos que se vinieron haciendo previamente permitieron un mejor drenaje y evitaron inconvenientes mayores”, explicó el mandatario.

Los problemas que se presentaron fueron calles anegadas, principalmente la zona del bulevar que va camino al cementerio debido a que desde allí ingresa el agua de la zona rural. También hubo anegamiento en las últimas dos cuadras cercanas al Club Atlético Chabás; muchas casas se vieron afectadas por napas altas; y debió evacuarse a una familia.

“Previo a las lluvias hubo varias tareas que se vinieron haciendo porque no se sabía qué situación se venía. Y esas tareas continuaron a partir de las lluvias. Se trata de limpieza de canales y reacondicionamiento de diversos sectores para que el agua circule de manera ordenada. Todo con el objeto de paliar la problemática hídrica en la localidad”, indicó.

La entrega del mencionado fondo se realizó este martes en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno de Santa Fe. Estuvo presente el gobernador Miguel Lifschitz, el vice Carlos Fascendini el ministro de Gobierno y Reforma del Estado Pablo Farías, el director de Protección Civil Marcos Escajadillo, el subsecretario de Municipios y Comunas Lisandro Danna, y la subdirectora de Coordinación Territorial Maria Paula Salari, además del presidente comunal de Chabás Lucas Lesgart.

Zona rural

El presidente comunal se refirió también al complicado presente que atraviesan los productores agropecuarios como consecuencia de las lluvias: “aproximadamente el 60 por ciento de la cosecha todavía no se levantó. Y parte de lo que se levante se sabe que no va a servir”.

El principal problema es que quienes trabajan en los campos no pueden ingresar por el anegamiento de los caminos. Como consecuencia de esto se avizora “un futuro difícil. Creemos que el panorama va a estar complicado”, cerró Lesgart.