La desaparición física de Juan Pablo Descenci en un siniestro vial dio inicio a la actividad del grupo Prohibido Olvidar. Este colectivo de familiares de víctimas que perdieron la vida en accidentes de tránsito, cumple 10 años y lo conmemora homenajeando a quienes ya no están en este mundo.

“Lo que buscamos es cuidar la vida, porque cuando algo sucede ya no hay vuelta atrás. Eso sólo se logra cumpliendo las reglas”, destacó Marilyn Rege, integrante del grupo, en la previa a una fecha sumamente especial. Desde el 2007 organizan campañas destinadas a concientizar a la población y admiten que se ven algunos cambios. Muchos ciudadanos entendieron la importancia del uso de cinturones de seguridad y cascos. De todos modos, todavía luchan por bajar los índices de alcoholemia al volante.

Esta tarde, desde las 18.30, se invita a concurrir a la misa que se desarrollará en la Capilla San Nicolás del barrio Barracas. Posteriormente se realizará una breve procesión por las cuadras de alrededor, la cual culminará frente a la Plaza Simonetta. Quienes asistan podrán hacerlo con una vela en señal de respeto y silencio.

El grupo Prohibido Olvidar se constituyó con familiares, amigos y voluntarios autoconvocados de Casilda. Sus objetivos son, la exigencia de leyes que se cumplan para un tránsito seguro y el acompañamiento para aquellos que perdieron su vida por fatalidades viales.