El medico cardiólogo y precandidato a Senador Provincial por el Departamento Caseros argumentó que le gustaría corregir una “anomalía institucional autoprovocada”. Que según él se produce desde el año 2013, cuando Antonio Bonfatti llevaba los hilos de la provincia.

Nicolás Taraborelli, de la lista ‘Es con vos’, sintetizó: “Bonfatti gobernaba en minoría, siendo virtualmente imposible que le aprobaran alguna ley. A cambio de hacerlo, los Senadores se auto adjudicaron una partida millonaria mensual de fondos de utilización discrecional”. Esa partida, criticada en su momento, estaría encubierta bajo el nombre de Programa de Fortalecimiento Institucional -PFI-.

"Terminó siendo el eje de la tarea del los Senadores, haciendo que en sus mandatos se dediquen a distribuir estos fondos. No puede conocerse el monto, ni cuanto se le asigna a cada institución. Así, se dejó de lado las tareas para la que fueron electos: Legislar y gestionar obras para el Departamento que representan.

Por otra parte, dijo que el hecho que un legislador tenga la potestad de asignar dinero, atenta contra el espíritu republicano de la división de poderes y que “se confunde con el ejecutivo”, transformándolo en "una especie de mini gobernadores” que se eternizan en el cargo.

Las Instituciones intermedias tienen que continuar siendo apoyadas, ya que son de extrema importancia para la vida en una sociedad sana y en paz, pero este financiamiento no debiera estar en manos del poder legislativo y en el caso que lo así lo siga estando, la asignación tiene que ser extremadamente transparente, con información de acceso publico”, amplió Taraborelli.

En el mismo tenor recordó que dicho fondo pertenece a los contribuyentes y en ningún momento un Senador puede arrogarse bondad o generosidad alguna al volcarlos a sus dueños legítimos.

Lo expuesto anteriormente no es un concepto abstracto, ya que el hecho de que los integrantes de la Cámara Alta estén décadas en las bancas repartiendo dinero genera, entre otras cosas, que no se hayan concentrado en la gestión del tan necesario acueducto SUR 1”, apuntó el precandidato. 

Finalmente, disparó: “Que nuestro Senador haya estado dos décadas en la banca repartiendo dinero, hace que no se haya ocupado de la salud pública, de gestionar los recursos necesarios para su financiamiento y de habilitar la tan necesaria reforma de la ley de SamCo”.