Arrancaron las semifinales de la Casildense y nos trajeron un resultado impensado, y otro, algo esperable.

Atlético Pujato era y sigue siendo el candidato natural. Actual bicampeón, líder de la fase regular y con un amplio plantel de jugadores consagrados. Pero, la tarde del domingo en el Polideportivo le fue sumamente esquiva. Alumni mantuvo su regularidad defensiva y fue oportuno en ataque. Lo golpeó en el primer tiempo por un anticipo de Encina tras un desborde de Cesanelli y después lo sostuvo con su firmeza. En el segundo tiempo se soltó de entrada e hizo un gran negocio en una jugada. Encina remató, Cimarelli se tiró con la mano en el área y el juez Diego Bernini no tuvo más remedio que expulsarlo ya que arrastraba una amarilla. Daniel Casadei amplió el resultado desde su jerarquía y experiencia para ejecutar el penal. El Alazán, con uno más, no sufrió y hasta se dio algunos lujos, como el taco de Schiavoni para habilitar al gol a Laucha Rodríguez que con un tiro cruzado puso el 3-0 definitivo.

En Arequito, el clásico fue algo chato. Cerrado, peleado, disputado en la mitad de la cancha. Con mucha gente y poco fútbol, como suelen darse estos derbys de instancias definitorias. Puede que el 0-0 le cierre a Belgrano, que entró al terreno con bajas importantes y jugaba de visitante. Tan enredado fue el trámite que los destacados fueron Gentini y Oracio. Los volantes centrales de Nueve y Belgrano.

El próximo domingo, se definen los finalistas del Apertura. No hay diferencia de goles ni ventaja deportiva, y tampoco tercer partido. Pujato ganando por cualquier resultado, envía a Alumni a definir por penales. Y si hay un ganador en el Nuevo Charquito, eliminará a su enemigo íntimo. Nada está decidido, quedan siete días de especulaciones.