El miércoles se disputaron cinco de los seis juegos de la novena fecha del Clausura de la Casildense. Por cuestiones organizativas, Casilda Club-Belgrano se programó para el pasado jueves. Pero, el día amaneció lluvioso, y la cancha de Unión que ya se había utilizado el miércoles y debía volver a usarse el domingo, amenazaba con no aguantar. Por ende, la determinación fue la de postergar todo una semana. Era así hasta que los dirigentes revisaron el reglamento y encontraron que en las últimas tres fechas de un torneo, no se admiten postergaciones. La mitad de los clubes aceptó esas reglas y el resto llamó a votar para hacer una excepción y motivar la primera moción de jugar la décima fecha el domingo 2 y completar la novena el miércoles 5.

Las posturas se igualaron. La votación culminó 6 a 6 y debió definir el Órgano Ejecutivo que no tuvo más remedio que hacer valer lo escrito. Así lo explicó Ricardo Pozzi, presidente de la Liga, en Radio Casilda. “Hubo una reunión de los doce clubes involucrados en el torneo y para hacer una excepción al reglamento, se necesitaba el voto de la mayoría para que un equipo no jugara con la ventaja deportiva de los resultados puestos. En la votación hubo un empate y el ejecutivo resolvió ajustarse al reglamento”, afirmó el titular de la LCF.

La cuestión recae en que si Casilda Club pierde con Belgrano el domingo, enfrentará a Unión si chances de clasificarse a play-off. Caso contrario hubiese jugado todas sus posibilidades ante el Tricolor. Eso quedó en el terreno de las especulaciones.

Pasando en limpio, la novena jornada se completa el domingo. La fecha 10 se juega el miércoles, casi en su totalidad, con la excepción de uno de los dos juegos con sede en Casilda que deberá jugarse el jueves. El lunes se va a sortear cuál de los dos, tiene lugar un día más tarde. La bolilla girará en torno a Aprendices-Alumni, y el tan mentado Unión-Casilda Club.