A través de un allanamiento sorpresa que se concretó el pasado martes, el personal de Gendarmería Nacional ingresó por la fuerza al predio de un campo situada en cercanías al casco urbano de Villa Mugueta. En el lugar encontraron un precaria vivienda habitada por un hombre de 43 años, con claros indicios de explotación laboral.

La Fiscalía Federal, a cargo de la causa, ordenó tomar de muestra de agua y de huellas dactilares, entre otras acciones. En el sitio también actuaron Renatre Sur de Santa Fe, Uatre Delegación Rosario, el Programa Nacional de Rescate, y el Comité Ejecutivo de Lucha en contra de la Trata y Explotación de Personas y para la Protección y Asistencia a sus Víctimas.

Por los primero detalles que se conocen, el peón fue llevado hasta allí con la falsa promesa de conseguirle una vivienda para él y su mujer, más un empleo. Los inspectores estiman que el objetivo del empleador no era tenerlo para trabajar, ya que nunca tuvo las herramientas ni trabajo registrado ni salario decente. Se le abonaban 20 mil pesos mensuales por trabajar de lunes a lunes, y se les descontaban los alimentos.

La persona rescatada, oriunda de la provincia de Entre Ríos, fue puesta a resguardo en el marco del Programa de Asistencia a las Víctimas de Trata de Personas y Rescate. Y actualmente se encuentra en un hotel de Rosario que ofreció gratuitamente la Uatre.

La habitación donde el trabajador fue encontrado, era una especie de cochera abandonada de una casa deshabitada, al lado tenía una diminuta piecita completamente llena de humedad paredes y techo y una ventanita con vidrios todos rotos.

Las paredes presentaban grietas de piso a techo, instalación eléctrica completamente precaria a punto de cortocircuito, sin agua potable, el baño era una derruida letrina en el exterior, en medio de un yuyal y rodeado de agua estancada con techo lleno de filtraciones, realmente lamentable”, describió Andrés Alasia, de Renatre Sur Santa Fe.