El pasado 15 de marzo se cumplieron 50 años desde la primera edición impresa del Periódico ‘Ecos de Arequito’. Para recordar ese momento y cerrar una etapa que ha sido sumamente enriquecedora, se distribuyó un especial histórico que marca los hitos que sucedieron desde que el medio de comunicación se instaló en el pueblo. Ahora, se inicia otro trajinar.

Carlos Larrambebere y Graciela Blanc fueron quienes le dieron vida a este diario que nació en 1974. En diálogo con Martín López en 'El equipo de la mañana", ésta última señaló: “Abrimos caminos, porque cuando empezamos no había nada en Arequito. Eran épocas muy duras para hacer periodismo”.

Las primeras dos décadas, el Ecos se confeccionaba en la imprenta de Santillán, en la localidad de Casilda. Épocas de un trabajo sumamente artesanal, recordó su fundadora. De hecho, si hay algo que ha cambiado mucho en estos 50 años son los procesos de agilización en la impresión de los diarios. Algo que también atentó contra la inmediatez de un matutino quincenal.

Destaco la línea de seriedad y constancia que siempre mantuvimos. El diario nunca dejó de salir, a pesar que a veces nos sobraban motivos”, agregó Blanc. Quien además destacó el formato alejado del amarillismo que plantearon. Algo que siempre les valió el respaldo de sus auspiciantes, a tal punto que hoy el medio no cuenta con pauta oficial y se sostiene sin inconvenientes.

¿Y ahora, cómo seguirá? Es la gran pregunta que se plantea luego de la edición de la Boda de Oro. El museo local le entregó a la familia Larrambebere una placa especial para dejar sentado su función como archivo histórico.

Vamos a estar lanzando ediciones de colección, aprovechando el material que se recopiló estos 50 años. Ecos de Arequito no va a cerrar sus puertas, abre una nueva puerta”, cerró la entrevistada.