En las últimas horas la Secretaría de Energía salió al cruce de la crisis y anunció un acuerdo con las principales operadoras petroleras para que importen diez barcos de combustible para satisfacer la demanda.

En Santa Fe, extensas filas de vehículos en pos de cargar un combustible que escasea. En los surtidores faltan las naftas y cunde la angustia.

De cualquier modo, el gobierno atribuyó esta escasez al "aumento reciente de la demanda", que presentó "consumos inusuales" en la semana previa a las elecciones del 22 de octubre.

A partir del entendimiento, se estimó que "en los próximos días se solucionarán los faltantes" en todo el país y se normalizará el abastecimiento de combustible, según se informó.

El ministro de Economía, Sergio Massa, ratificó que el Gobierno nacional tomó la decisión de importar 10 barcos de combustible para normalizar rápidamente el abastecimiento, ante el pico de demanda del último fin de semana que provocó un quiebre de stocks en varias estaciones de servicio.

"El origen del problema es que el fin de semana pasado hubo un 15% mayor de consumo que el mismo fin de semana que el año anterior y se produjo un quiebre de stocks para las empresas. Aspiramos a que se normalice rápidamente", dijo Massa, en breve encuentro con periodistas a la salida del Ministerio de Economía.