Sin lugar a dudas, la noticia que conmocionó a toda la sociedad argentina en las últimas horas fue la serie de muertes debido al consumo de cocaína adulterada. Las primeras víctimas se registraron en Buenos Aires, pero a los pocos días comenzó a replicarse en Rosario. Qué pasa si llega a Casilda. 

Son decenas los fallecidos tras ingerir cocaína aparentemente adulterada con alguna otra sustancia. Otros tantos se encuentran internados y en estado reservado. La preocupación se extiende a lo largo y ancho del país, y Casilda no es la excepción. 

Por esto, El Equipo de la Mañana de Radio Casilda decidió comunicarse con el director del Hospital San Carlos, Omar Moya, para consultarse sobre esta situación. 

“Se sospecha que fue una contaminación de la cocaína con otros elementos opioides", expresó. "Y la realidad es que los hospitales estamos preparados para atender pacientes con problemas de intoxicación con opioides.“

Lo cierto es que la noticia de los casos ocurridos en la ciudad de Rosario encendió una alarma obvia en todos los efectores de salud de la provincia de Santa Fe. "Eso nos pone en alerta", sostuvo Moya. "Lo que hemos hecho es recordarles los protocolos a nuestros médicos, la identificación de los casos para hacer un diagnóstico correcto y los tratamientos acordes para tratar estos casos, está todo en marcha”, aseguró.

El director del Hospital más importante de la región hizo fuerte hincapié en que las condiciones están dadas para tratar estos casos. Tanto la parte clínica, como las guardias y hasta las salas de terapia intensiva están bien preparadas para atender casos semejantes. 

Sobre los protocolos, Moya explicó que existe medicación específica y formas específicas también de utilizarlas en esos casos. Remarcó que lo primordial es "una correcta identificación de síntomas que caracteriza a esa intoxicación para dar un buen diagnóstico".

Además, contó que todos los fines de semana el Hospital San Carlos recibe consultas por intoxicaciones con alcohol o alcaloides. "Específicamente por contaminación o intoxicación con opioides no hemos tenido para nada y esperamos seguir así”, expresó. 

Al momento de atender un paciente que llega a la guardia con una intoxicación el protocolo es cambiante. Lo primero que debe hacer el personal de salud es determinar el estado de gravedad del cuadro de intoxicación. Ésta puede ser leve y ser atendida en la guardia o puede necesitar de internación o hasta de terapia intensiva. 

La suba de casos de intoxicaciones va en crecimiento en nuestra ciudad y esta problemática preocupa a las autoridades sanitarias. “Tiene que primar la prevención, tratar a un paciente con una complicación con adicción es terriblemente problemático para el resto de la sociedad y nadie puede dar vuelta la cara y decir que este problema no es mío”, sostuvo Moya.

“En la prevención involucramos la educación en ámbito familiar, la educación en el ámbito social, el acceso a los recursos y al cariño en el seno familiar, es una problemática muy importante”, cerró.

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