Un hombre llegó el lunes por la noche al kiosco de Lisandro de la Torre al 3000, bajó de su moto, y entró bien resuelto a consumar un asalto. Ni hizo falta que sacara el arma que dejó ver en su cintura. Fue el tercer robo en lo que va del año en ese comercio de Nueva Roma.

Ocurrió pasadas las nueve de la noche. Los dueños vieron llegar a un hombre, y presintieron lo peor cuando éste ingresó al local sin sacarse el casco de la moto. 

Si bien no se trató de un gran botín, los encargados de llevar adelante la actividad del comercio están preocupados porque es la tercera ocasión en la cual son asaltados. Las dos anteriores habían sido robos de tipo escruche, con la incursión de delincuentes que se llevaron mercadería, pero en horas en los que el comercio estaba cerrado. 

El maxikiosco no cuenta con sistema de cámaras de seguridad y tampoco hay alguna cerca en la zona. De todas maneras, se radicó la denuncia y el personal policial estuvo trabajando hasta horas de la madrugada para recabar datos y tomar declaraciones.